Después de la digestión y viendo que el Osasuna ya sería difícil que remontara los dos goles que le había endosado el Barcelona, me he calzado las zapatillas y me he dirigido hacia el polígono.
Allí, con una tranquilidad pasmosa, le he dado tres vueltas con unos tiempos de 12:33, 12:18 y 12:08 y me he vuelto para casa, pasando de la tranquilidad al enorme bullicio de vehículos.
El reloj marcaba las 19:26 y en el horizonte, por donde todos los días amanece el Sol, asomaba toda esplendorosa La Luna. Dos aceleraciones de unos 200 metros para desengañar al cuerpo y pulsar el crono para detenerlo cuando transcurría una hora justa ha sido el final del entreno de hoy.
Ya en casa me he enterado que no han sido dos, sino siete. Creo que deberían haber dejado alguno para la próxima semana. Espero me sirva esto de algo para poder terminar la Maratón del próximo día 13 de abril en Londres.
Gracias a la libertad de expresión y a este medio de comunicación, lanzaré "al Aire" aquellas opiniones y aquellos escritos, tanto de mi propiedad como aquellos que me lleguen de compañeros, amigos o desconocidos. Siempre evitando, por todos los medios, faltar al respeto.
Terminarla y con nota Gaspar
ResponderEliminarUn saludo